lunes, mayo 31, 2004

La última de "La Española"

Siempre me he preguntado por qué algunos periodistas se refieren a la Federación Española de Fútbol como “La Española”, igual que la aceituna; como si en España tuviéramos también una Federación Francesa de Fútbol y hubiera que diferenciarlas.

Pero no quería hablar de eso. Si lo que pretendía “La Española” al renovar a Iñaki Sáez era transmitir tranquilidad alrededor de la selección, el tiro le ha salido por la culata: tenemos polémica, y con la Eurocopa a dos semanas vista. Una polémica totalmente innecesaria, el último desvarío de una casa de locos. No parece el mejor momento para emitir juicios, pero puestos a juzgar, resulta que, a día de hoy, los méritos de Sáez comprenden la derrota en casa con Grecia, el empate a cero en Irlanda del Norte y, eso sí, la gloriosa repesca, vendida como un éxito sólo porque tuvo final feliz.

Sólo queda desear al seleccionador los mayores éxitos para que esos dos años que ha firmado nos parezcan pocos. Y también queda pedirle que, si las cosas no salen bien en Portugal, renuncie a su cargo en julio (no en agosto, como Camacho) sin cobrar un duro. Aunque tal y como está “La Española”, igual le ofrecen cobrar la indemnización en cheques de Viajes El Corte Inglés.