sábado, junio 05, 2004

De interés general

Apenas 1.665.000 espectadores siguieron el pasado jueves el debate a ¡seis! bandas entre otros tantos cabezas de lista al Parlamento Europeo. Es el resultado más pobre de La Primera en prime time en lo que va de año. El próximo sábado, en el mismo canal, no menos de 10 millones de españoles estarán pendientes del España-Rusia que se disputará al sol del Algarve.¿Qué tipo de país somos?

Tal vez seamos un país poco modélico en determinadas cosas, sí. Quizá mostremos poca preocupación por temas cruciales (y no me refiero precisamente a las elecciones europeas) y pongamos demasiado interés en otros de aplastante banalidad (ojalá hubieran tenido razón aquellos que decían hace unos años que la prensa rosa en televisión era una moda que, como tal, acabaría pasando). Pero, por encima de todo, somos un país al que el fútbol le apasiona ¿Qué hay de malo en ello?

Esta semana, en vísperas de la Eurocopa, muchos hinchas devoraremos con avidez periódicos y guías editadas para la ocasión. Si El País vende más ejemplares esta semana será por el suplemento con el que esperamos que nos obsequie su redacción de deportes, no por las promesas de Mayor Oreja o Borrell. Lo único que tienen en común estos días los políticos y futbolistas españoles es la percepción popular de que, a la hora de la verdad, no son más que unos desgraciados que siempre nos acaban defraudando.