La previa (Día 4): Un inédito y un clásico

REPÚBLICA CHECA - LETONIA. Ardemos en deseos de comprobar cómo son estos letones. ¿De verdad habrán venido a sacar más de un punto? Si es así, ¿cómo piensan obrar el milagro? ¿Atrincherados atrás y confiando en la velocidad del tal Verpakovskis? Supongo que sí, pero su puesta de largo pica mi curiosidad. Los checos parecen fiables, tienen buenos jugadores y se sienten a gusto en este torneo. Si no pasan el grupo será para mí una sorpresa.

ALEMANIA - HOLANDA. Beckenbauer no estaba dispuesto a que nada, ni siquiera la naranja mecánica, se interpusiera entre Alemania y la Copa del Mundo. La rivalidad entre holandeses y alemanes, por tanto, viene de lejos. En los 80 se recalentó con los malos modos de Koeman (secándose expresivamente el sudor con la camiseta que le había cambiado a Olaf Thon) y Rijkaard (un tipo al que hoy tenemos por educado pero que le estampó un escupitajo antológico en la cara al actual seleccionador alemán, Rudi Voller). A día de hoy, Holanda siembra muchas dudas y Alemania, que nunca enamora, esta vez ni siquiera convence. Lo mejor de ambas son los jóvenes: Van der Vaart, Snejider, Lahm y el del nombre impronunciable, Schweinsteiger. Ojalá que tengan minutos. El morbo está en Kahn, que hoy cumple 35 años.
PD - Hablando de Alemania, los hay que hilan muy fino, creo yo que demasiado. En cualquier caso, he aquí una curiosa recopilación..